La sostenibilidad del sistema público de Salud será sin duda uno de los aspectos que afrontará Mato. 

La Ministra de Sanidad, Ana Mato, detallará este miércoles, en su primera comparecencia ante la Comisión de Sanidad y Servicios Sociales del Congreso, las líneas generales que prevé emprender al frente de su departamento.

La sostenibilidad del sistema público de Salud será sin duda uno de los aspectos que afrontará Mato. Es posible que informe de futuras iniciativas de recorte. Desde algunos sectores se señala que los recortes no han de basarse en el argumento de que el gasto farmacéutico es muy superior al de otros países de nuestro entorno. Insisten, además, que no es cierto que el 25% del gasto sanitario sea motivado por el gasto farmacéutico

De acuerdo con las estadísticas de gasto sanitario que aparecen en la web del Ministerio de Sanidad, en 2009 el gasto farmacéutico representaba el 20,6% del gasto sanitario en el SNS. El gasto farmacéutico público per cápita en nuestro país está un 9,4 por ciento por debajo de la media de gasto de los países de la Eurozona.

Un reciente análisis indica que el gasto farmacéutico representa actualmente el 17,6% del gasto sanitario, así que el gasto farmacéutico no es excesivo. Por otro lado, España gasta de manera similar a Alemania y menos que Francia. Los países nórdicos y otros, como Reino Unido, Holanda o Suiza, dedican menor porcentaje de su PIB a esta partida de farmacia. En nuestro país, se utilizan fármacos para cubrir las ineficiencias del sistema o controlar a pacientes que se encuentran en listas de espera quirúrgica, precisamente a causa de un déficit de inversión en Sanidad. Por lo que es un error analizar el gasto farmacéutico como una partida independiente, sin tener en cuenta que su evolución está intrínsecamente vinculada a la evolución de los presupuestos sanitarios.

El que el gasto farmacéutico público sea mayor o menor en un país o en otro depende en última instancia de dos variables fundamentales: de la amplitud del catálogo de medicamentos financiados y del nivel de generosidad/gratuidad de la prestación farmacéutica pública. 

Fuente: www.imfarmacias.es