Se requiere un protocolo adecuado y homogéneo del cuidado de la diabetes y de una de sus comorbilidades, la retinopatía diabética, ante las diferencias existentes entre las distintas Comunidades Autónomas

Representantes de las principales sociedades científicas y de pacientes del país relacionadas con la diabetes, reunidos en la Real Academia Nacional de Medicina, han concluido en la necesidad de establecer un protocolo de tratamiento y prevención estándar adecuado y homogéneo del cuidado de la diabetes y una de las más temidas comorbilidades, la retinopatía diabética, ante las diferencias existentes entre las diferentes Comunidades Autónomas.

En este escenario, la Dra. Sonia Gaztambide, Presidenta de la Sociedad Española de Diabetes (SED) y coordinadora de la sesión “Prevención de la Retinopatía Diabética y Ceguera”, ha destacado que “los pacientes españoles tienen un acceso desigual a la opción de prevenir y controlar la retinopatía diabética según la comunidad autónoma en la que habitan debido a la desigualdad de acceso a retinógrafos entre profesionales de diferentes regiones”. Esta tecnología fotografía digitalmente el fondo del ojo para la detección y diagnóstico de enfermedades relacionadas con la retina. Asimismo, permite almacenar las imágenes en un sistema informático para su posterior análisis en un centro que no tiene que ser necesariamente el mismo en el que se ha realizado la prueba. La Dra. Gaztambide ha apuntado también la inexistencia de un registro nacional que identifique los retinógrafos distribuidos en el territorio.

La retinopatía diabética es una complicación de la diabetes como resultado de los daños producidos en los vasos sanguíneos de la parte posterior del ojo que en fases avanzadas puede derivar en una pérdida grave de visión y ceguera. Está previsto que en 2030 el número de personas que sufren diabetes en Europa aumente desde 55,2 millones en 2010 hasta 66,2 millones. En España, aproximadamente 5 millones de personas tienen diabetes y 2.500 pierden la visión cada año por culpa de la enfermedad. “Sabemos que el riesgo de que las personas afectadas con diabetes pierdan la visión es hasta 25 veces más elevado que en la población que no sufre de diabetes”, ha especificado el Dr. Francisco Gómez-Ulla, Presidente de la Fundación Retina+ y catedrático de oftalmología en la Universidad de Santiago de Compostela.

Desde el colectivo de pacientes, representados por Ángel Cabrera, presidente de la Federación de Diabéticos Españoles (FEDE) se ha corroborado la necesidad de desarrollar medidas homogéneas de prevención y educación en pacientes con diabetes ante el impacto en la calidad de vida del paciente que supone la pérdida de visión. En este sentido, aunque las revisiones oculares periódicas permitan realizar un diagnóstico precoz y un tratamiento temprano, la gran mayoría de los pacientes con diabetes todavía no son conscientes de la necesidad de someterse a reconocimientos periódicos. 

“Mientras la prevalencia de la diabetes sigue incrementándose, la retinopatía diabética se mantiene como una de las principales causas de deficiencia visual y ceguera en la población en edad de trabajar. Es por tanto frustrante en toda su dimensión cuando escuchamos desde la Organización Mundial de la Salud que el 85% de las deficiencias visuales en su globalidad podrían evitarse”, ha comentado la Dra. Sehnaz Karadeniz, miembro de la junta directiva de IDF Europa.

En este sentido, en España las políticas públicas tienen mucho que decir en materia de prevención y cuidado de la diabetes y sus complicaciones, dentro del marco de la territorialidad de las competencias en salud y del problema específico de la cronicidad en un contexto de ajustes y fuerte debate sobre la sostenibilidad del sistema público de salud. 

Sobre la Retinopatía Diabética

La retinopatía diabética es una complicación de la diabetes como resultado de los daños producidos en los vasos sanguíneos de la parte posterior del ojo. El riesgo de que las personas afectadas con diabetes pierdan la visión es hasta 25 veces más elevado que en la población que no sufre diabetes. La deficiencia visual es por tanto la complicación más temida de la diabetes.

Existen dos etapas principales en la retinopatía diabética: una primera etapa de retinopatía diabética no proliferativa y una etapa posterior de retinopatía diabética proliferativa.

Las fugas del fluido dentro de la retina, que es la capa que permite la claridad de la visión central, se denomina Edema Macular Diabético (EMD). Puede producirse en ambas etapas y en todos los pacientes afectados con diabetes de tipo 1 o de tipo 2.

Cuando el edema macular  es Clínicamente Significativo (EMCS) es el más temido para la visión, y el causante de pérdidas de visión moderadas a graves.

Actualmente, aproximadamente el 11% de los pacientes de diabetes tienen EMD, y hasta de un 1 a un 3% llegan a sufrir una pérdida grave de visión debido al EMD.

Sobre “Prevención de la Retinopatía diabética y ceguera”

La iniciativa liderada por la  International Diabetes Federation (IDF) “Prevención de la Retinopatía diabética y Ceguera” se lanzó en el mes de diciembre de 2010 en el Parlamento Europeo, y se presentó posteriormente en Malta, Alemania y, de la mano de la Sociedad Española de Diabetes, como miembro español de la IDF, en España.

Nace con el objetivo de generar interés, sensibilizar y concienciar a las Autoridades, en este caso  españolas, en la necesidad de promover iniciativas, y reforzar las existentes, que fomenten el control de la diabetes y la prevención de sus complicaciones, en concreto, de la Retinopatía Diabética.

En España se ha celebrado esta jornada de debate, en la Real Academia Nacional de Medicina, que ha contado con la participación de expertos en las diferentes disciplinas implicadas en el diagnóstico y tratamiento de la Retinopatía Diabética, médicos de familia, diabetólogos y oftalmólogos, así como miembros de la Administración Pública y el entorno político-legislativo, pacientes y divulgadores

Fuente: Hill + Knowlton Strategies