Con motivo de la celebración del Día Europeo para Uso Prudente de los Antibióticos
La Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (SEIMC), con motivo de la celebración del Día Europeo para el Uso Prudente de Antibióticos, hoy 16 de noviembre, incide en la importancia de utilizar este tipo de medicamentos de forma adecuada, para, de esta manera, evitar que las bacterias se vuelvan resistentes y los antibióticos dejen de tener eficacia.
Este día, promocionado y coordinado por el Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades (ECDC) desde 2008, pretende dar a conocer la amenaza que supone para los ciudadanos europeos hacer un uso abusivo o incorrecto de los antibióticos. La resistencia a los antibióticos es un problema de salud pública que pone en riesgo a aquellos pacientes que necesitan o van a necesitar los antibióticos en situaciones críticas para su salud.
Es de vital importancia que la población haga un uso responsable de los antibióticos y que siga rigurosamente la prescripción médica. Se deben tomar las dosis recomendadas, a las horas indicadas y durante los días establecidos por el médico o se corre el riesgo de favorecer el aumento de las resistencias.
Limitaciones en las alternativas de tratamiento
Uno de los principales problemas en relación con las bacterias resistentes es la pérdida de alternativas de tratamiento antibiótico frente a las infecciones producidas por bacterias multirresistentes, aquellas que son resistentes a tres o más familias de antibióticos.
Cada vez son más frecuentes los casos en los que los únicos antibióticos que se pueden utilizar son antibióticos antiguos que se desarrollaron hace décadas y cuyo uso se limitó debido a los efectos secundarios. El Dr. Jesús Oteo, miembro de la SEIMC e investigador titular del Laboratorio de Antibióticos del Centro Nacional de Microbiología, advierte: “el número de nuevos antibióticos en investigación es escaso. Existe un riesgo real de que nos quedemos sin antibióticos eficaces para tratar determinadas infecciones bacterianas”.Por ejemplo, los antibióticos carbapenémicos, que se utilizan como última posibilidad de tratamiento en muchas infecciones, son una de las familias más eficaces contra bacterias como Klebsiella pneumoniae yPseudomonas aeruginosa. Sin embargo, la resistencia a estos antibióticos en K. pneumoniae, bacteria causante de neumonías e infecciones en pacientes ingresados en unidades de cuidados intensivos y en neonatos, ha experimentado un fuerte aumento en algunos países de nuestro entorno como Grecia (del 28% en 2005 al 67% en 2011), y en España ya se han detectado importantes brotes hospitalarios producidos por este tipo de bacterias. En P. aeruginosa, bacteria que infecta heridas, tracto pulmonar, tracto urinario y causa infecciones en la sangre,la resistencia afectó a un 22% de las cepas en 2010. En España, esta cifra aumentó del 15% en 2006 al 21% en 2011.
Importancia del uso prudente de los antibióticos
El tratamiento con antibióticos inadecuados y el retraso en la administración de un tratamiento correcto en aquellos pacientes con infecciones graves está relacionado con una peor evolución clínica y, en ocasiones, con la muerte. El ECDC estima que en Europa más de 25.000 pacientes mueren al año por bacterias multirresistentes y que los gastos anuales por prolongación de la estancia hospitalaria y pérdidas de productividad debido a este motivo son superiores a los 1500 millones de euros. El Dr. Oteo comenta: “Nos estamos quedando sin antibióticos eficaces debido a la rápida progresión de las resistencias y esta progresión se produce en gran parte por su uso incorrecto. Una administración prudente de los antibióticos puede contribuir a detener el desarrollo de bacterias resistentes y ayudar a que éstos sigan siendo eficaces en el futuro”.
Además, gran parte de las técnicas y procedimientos de la medicina actual (cirugía mayor, tratamientos contra el cáncer, trasplantes de órganos) no serían posible sin antibióticos eficaces.
España, entre los países más afectados
Los datos más recientes confirman que el número de pacientes infectados por bacterias resistentes está aumentando de forma alarmante en la Unión Europea, y en concreto en nuestro país.
Según expertos de la SEIMC, Escherichia coli, bacteria responsable de infecciones intestinales y extraintestinales en ocasiones graves, ha aumentado su resistencia de manera considerable en los últimos años en España. La multirresistencia en esta bacteria se ha duplicado durante la última década, pasando del 12% en 2001 al 26% en 2011.
Staphylococcus aureus es uno de los patógenos humanos más frecuentes, causa habitual de infecciones de piel, tejidos blandos, infecciones quirúrgicas y neumonías, entre otras. Alrededor del 23% del total de infecciones de sangre producidaspor S. aureus en 2011 en España se produjo por bacterias resistentes a la meticilina. Este porcentaje contrasta con las tasas de resistencia que se dan en otros países de Europa, como Holanda o Noruega (<1%).
Acerca de los antibióticos
Los antibióticos son un tipo de medicamento que puede matar a las bacterias o inhibir su crecimiento y así curar las infecciones. Los antibióticos no curan infecciones causadas por virus, como el resfriado común o la gripe, únicamente son eficaces para combatir las infecciones bacterianas. El diagnóstico correcto y la decisión respecto a la necesidad de administrar antibióticos son competencia exclusiva de los médicos, por ello se han de seguir siempre las indicaciones del médico y tomar los antibióticos cómo y cuándo él lo indique.
Se dice que una bacteria ha desarrollado resistencia cuando un antibiótico específico pierde su capacidad para eliminarla o para detener su crecimiento. Las bacterias resistentes sobreviven en presencia del antibiótico y siguen multiplicándose, prolongando la enfermedad e incluso causando la muerte.
El uso excesivo e inadecuado de los antibióticos acelera la aparición y la propagación de bacterias resistentes. Éstas pueden diseminarse y causar infecciones a otras personas que no hayan tomado ningún antibiótico. Las bacterias resistentes podrían llegar a ser inmunes frente a cualquier antibiótico conocido.
Fuente: Ketchum Pleon