EL ALIMENTO IDEAL DE UN NIÑO DURANTE LOS PRIMEROS MESES DE SU VIDA ES LA LECHE MATERNA.
La leche materna es el alimento ideal para la alimentación del lactante. El amamantamiento es la forma natural de alimentar, cuidar y proteger al niño. La leche humana y el calostro (el líquido amarillento que segrega la mama los dos o tres primeros días) ayudan a proteger a tu hijo contra muchas enfermedades e infecciones. Los niños alimentados con pecho presentan un riesgo menor de infecciones, alergias, diabetes, diarrea, eccemas (dermatitis atópica), asma y otitis media. Es de fácil digestión y no presentará alteraciones nutricionales, ya que es la leche propia de la especie humana.
El hecho de darle el pecho a tu hijo, hace que te sientas tan útil para él y tan protectora, que se estrecharán vuestros lazos afectivos de una manera muy especial. Además de alimentado se siente querido y arropado.
En cuanto a la madre, te facilitará una mejor recuperación tras el parto previniendo hemorragias. Te ayudará a perder con más facilidad el peso que has ganado durante el embarazo. Disminuye el riesgo de padecer algunos tipos de cáncer (ovario y mama). Pero lo más importante es la tranquilidad que vas a sentir al proporcionarle a tu hijo el alimento más adecuado y seguro para él.
Si estás dando pecho a tu hijo/a y tomas algún medicamento consulta a tu pediatra o a tu farmacéutico/a ya que hay medicamentos que pasan a la leche y pueden perjudicar al bebé.
CUANDO VAYAS A DAR EL BIBERÓN:
• La temperatura de la leche debe ser igual o ligeramente inferior a la del cuerpo (35-37º C).
• El bebé debe estar despierto y un poco incorporado.
• Si el/la niño/a no quiere más no insistas y tira lo que sobre del biberón.
ANTE CUALQUIER DUDA CONSULTA A TU PEDIATRA O FARMACEUTICO/A