Prebióticos y simbióticos

Los prebióticos son sustancias de la dieta:

  • suelen ser de origen vegetal), polisacáridos no almidón y oligosacáridos
  • no digeribles por enzimas humanas,
  • nutren grupos seleccionados de microorganismos que habitan en el intestino favoreciendo el crecimiento de bacterias beneficiosas.
  • Promueven la producción de AGCC (ácidos butírico, ácético y propiónico).
  • Osmóticamente activos, aumentando el peso de las heces y la frecuencia de la evacuación intestinal.
  • Son utilizados como ingredientes de alimentos.

Los más conocidos son:

– Fructo-oligosacáridos (FOS)

  • Oligofructosa, obtenidos de la hidrólisis de la inulina
  • Inulina (polisacárido que se encuentra en trigo, cebolla, ajo, puerro, miel, plátano, alcachofa, leche materna, endivia, achicoria)

– Galacto-oligosacáridos (GOS). Oligosacáridos de moléculas de galactosa obtenidos a partir de la lactosa de la leche. También de localizan en las verduras.

– Lactulosa (azúcar de fructosa y galactosa). Se emplea en encefalopatía hepática, estreñimiento. Contraindicado en diabéticos e intolerantes a la lactosa. Produce fletulencias.

La fermentación de la oligofructosa en el colon da lugar a una serie de efectos

fisiológicos entre los que se incluyen:

  • Aumento del número de bífidobacterias.
  • Aumento de la absorción de calcio, magnesio, hiero y zinc.
  • Posiblemente reducen los niveles de colesterol sérico, al inhibir la HMG-CoA reductasa disminuyendo así la síntesis endógena de colesterol, triglicéridos y fosfolípidos.
  • Reducen los niveles de glucosa y parece reducir la resistencia a la insulina.
  • Aumento del peso fecal.
  • La presencia de FOS y GOS facilitan la formación de un ecosistema intestinal similar al que genera la leche materna.
  • Acortamiento del tiempo del tránsito gastrointestinal. Su acción laxante se explica por la reducción del tiempo de transito intestinal aumentando el volumen de las heces y el número de deposiciones (una ingesta excesiva provoca flatulencia, cólicos y diarrea).
  • Efecto protector frente a las infecciones intestinales.

Se supone que el aumento de bífidobacterias colónicas beneficia la salud al producir compuestos que inhiben los posibles patógenos, reduciendo los niveles sanguíneos de amoníaco, y produciendo vitaminas y enzimas digestivas.

Los requisitos que debe tener un prebiótico son:

  • Origen vegetal
  • No ser hidrolizado en el tracto gastrointestinal (resistente a la ácidez gástrica y a las enzimas digestivas).
  • No absorberse en el intestino delgado.
  • Ser fermentado selectivamente por bacterias beneficiosas de la microbiota en el intestino grueso y facilitar el crecimiento de estas.
  • Ser osmóticamente activo, aumentando el peso de las heces y la frecuencia de la evacuación intestinal.

Los simbióticos son combinaciones apropiadas de prebióticos y probióticos.