Transmisión: calzado.
Localización: pies, zonas de roce y presión.
Síntomas sistémicos: no existen.
Tratamiento: Calcetines acrílicos y zapatillas adecuadas. Antiperspirantes con cloruro de aluminio. Drenar sin recortar.
Un estudio doble ciego demostró que el uso de cloruro de aluminio al 20%, 3 días antes de una larga escalada, disminuye la formación de ampollas en los pies, comparado con placebo, pero se asocia a mayor irritación. En cuanto al tratamiento, no debe desprenderse el techo de la ampolla; solo debe drenarse el líquido y dejar que cure espontáneamente.