Utilizar zapatillas de deporte como calzado habitual puede provocar un exceso de sudoración y el desarrollo de hongos, eccemas y papilomas

El inicio del curso escolar va acompañado de una renovación de los equipos y del vestuario de los niños. Por este motivo, el Ilustre Colegio de Podólogos de la Comunidad Valenciana (ICOPOCV) quiere advertir a los padres de que optar por el calzado deportivo como zapato habitual puede provocar deformaciones en los pies de los más pequeños.

Desde el Colegio han señalado que es necesario utilizar un calzado adecuado a la edad y actividad que realicen para permitir un desarrollo físico y motor adecuado. En caso contrario, un calzado inadecuado podrá generar dolencias que podrán tener repercusión, incluso, en la madurez.

Por ejemplo, un uso abusivo del calzado deportivo puede provocar la aparición de hiperhidrosis (exceso de sudoración) y, con ello, el desarrollo de otras patologías como hongos, eccemas o papilomas.

El ICOPOCV ha indicado que para escoger adecuadamente el calzado de los más pequeños se pueden seguir las siguientes recomendaciones:

  • Que sea flexible en el antepie.
  • Que el interior no tenga costuras.
  • Que esté realizado con materiales flexibles y transpirables.
  • Que tenga cordones o velcro para proporcionar una sujeción eficaz.
  • Grosor de la suela suficiente para amortiguar los impactos.
  • Parte trasera correctamente ajustada al talón
  • Talón y puntera reforzados

Además, hay que comprobar que caminan adecuadamente con el nuevo calzado e insistir en si notan algún tipo de molestia, porque en caso afirmativo podrían modificar la pisada y provocar dolencias en otras zonas como la espalda o las rodillas.

Debido al rápido crecimiento de los niños, desde el ICOPOCV se aconseja revisar el calzado cada 6 meses para comprobar que sigue siendo adecuado.