Transmisión: piscinas, baños, zapatillas.
Infección por dermatofitos.
Localización: pies, IV espacio interdigital.
Síntomas sistémicos: no existen.
Tratamiento: antimicóticos tópicos. Calcetines absorbentes, zapatos con ventilación y uso de antiperspirantes con hidróxido de aluminio.
El tratamiento consiste en la utilización de un antimicótico, bien por vía oral o tópica. Por vía tópica la desaparición completa del dermatofito es difícil: un 65% de los pacientes vuelven a experimentar la enfermedad en un plazo de dos años. Para estas recaídas son de utilidad los antimicótico por vía oral. Entre los muchos fármacos utilizados para el pie de atleta podemos destacar los derivados del imidazol (econazol, miconazol, ketoconazol, entre otros), ciclopirox, tolnaftato o terbinafina.
Prevención incluye el uso de calcetines absorbentes y la aplicación de solución de hidróxido de aluminio al 20%.