
La probabilidad de sufrir un infarto de miocardio es seis veces superior durante los primeros siete días siguientes a la detección. Este hecho ha sido confirmado por laboratorio del virus de la gripe, según un estudio que se publica en el último número de The New England Journal of Medicine (NEJM).
Los resultados son relevantes y la asociación entre la gripe y el infarto agudo de miocardio, refuerzan la importancia de la vacunación.
Esta asociación fue superior en pacientes mayores, en infectados por virus gripales de tipo B y en pacientes que habían sufrido su primer infarto. Los investigadores también hallaron una asociación -aunque no tan marcada como en el caso de la gripe- con otros virus respiratorios.
Reducción de eventos cardiovasculares y mortalidad
Los hallazgos, junto con la evidencia previa de que la vacunación antigripal reduce los eventos cardiovasculares y la mortalidad, concuerdan con las guías internacionales que abogan por la inmunización frente a la gripe en las personas con alto riesgo de infarto de miocardio.
Los investigadores analizaron cerca de 20.000 casos de infección por virus de la gripe confirmada en el laboratorio entre 2009 y 2014 e identificaron a 332 pacientes que habían sido hospitalizados por infarto en los 12 meses siguientes al diagnóstico de gripe.