Ortesis antiequinas
Actualmente, su prescripción está muy extendida en la clínica. El objetivo de su empleo es el control del equinismo fijo o dinámico, asociado o no a varo/valgo del talón y a inversión / eversión del pie.
Al evitar el equinismo, se compensa la debilidad de los músculos flexores dorsales y se opone una resistencia a la flexión plantar en el contacto del talón y durante la fase de oscilación de la marcha humana. De esta manera, la flexión dorsal del tobillo queda libre, con lo que se normaliza la marcha.
Usadas en rehabilitación con el fin de facilitar la corrección de la posición del segmento inferior de la pierna y el pie, fijación del pie en un ángulo de 90º con respecto al eje de la pierna, o un medio de facilitación del movimiento de dorsiflexión del pie lo más parecido a su rango fisiológico normal.
Su correcta adaptación evita la caída del pie durante la fase de oscilación o balanceo y logra la disposición estable del pie en la fase de apoyo. Estas ortesis persiguen obtener una marcha con menos consumo energético, más segura y rápida.
Los objetivos que se persiguen a la hora de prescibrir un AFO, son los siguientes:
1. Estabilizar el pie en extensión dorsal máxima y pronación.
2. Compensar el alargamiento funcional de la pierna y la asimetría.
3. Descargar el antepié o zona de hiperpresión metatarsal.
4. Aumentar la superficie de apoyo plantar.
5. Disminuir la espasticidad de la musculatura.
6. Facilitar la marcha.
Existen tres aspectos clave a tener en cuenta a la hora de prescribir un AFO: la contractura en flexión plantar del tobillo, la posición en varo y el control de la rodilla, que puede presentar una importante debilidad del cuádriceps o un recurvatum.
El pie equino es una deformidad del pie congénita o adquirida, en la que éste se encuentra de forma permanente en posición de flexión plantar, existe dificultad para la dorsiflexión, que no llega a sobrepasar la posición media (10º de dorsiflexión de la articulación tibioperoneoastragalina), en aducción e inversión, el retropié en varo, con el hueso del tarso-calcáneo invertido. De forma que apoya la región anterior del pie al caminar (marcha de puntillas) sin que el talón llegue a entrar en contacto con el suelo, además del aumento exagerado de la flexión plantar existe una retracción del tendón de Aquiles.
No suele ser una deformidad aislada, suele acompañarse de otras alteraciones. Son frecuentes las asociaciones en varo o valgo, pasando a denominarse pie equinovaro y pie equinovalgo, respectivamente.
Puede estar afectado un pie o ambos.
Las causas más frecuentes son:
Pie equino-varo congénito también llamado pie zambo:
Forma más frecuente de pie equino, se desarrolla en la etapa intrauterina y se diagnostica al nacer. Estos pies además del equinismo presentan otras deformidades añadidas. Se observa un acortamiento del tendón de Aquiles con elevación del calcáneo.
Puede estar afectado un pie o ambos. El apoyo constate sobre los dedos de apoyo, produce deformidad y aparición de callos o durezas. Si pretender estar en posición erguida, deben realizar una hiperextensión de la rodilla y echar el cuerpo hacia delante, lo que conlleva a largo plazo lesiones en la rodilla y columna vertebral.

Pie equino varo adquirido
Existen diferentes alteraciones que afectan a la conducción nerviosa en el pie y extremidad inferior, de forma que alteran el patrón de marcha y dificultan la vida diaria del paciente.
Se provocan alteraciones biomecánicas cuyo patrón de marcha llega a dificultar la actividad cotidiana de los pacientes, de forma que el caminar, subir escaleras, levantarse de una silla, puede llegar a ser un problema.
Una de las causas es la parálisis del músculo tibial anterior, accidente cerebrovascular (ACV), lesiones de la médula ósea u otras enfermedades neurológicas como la esclerosis múltiple y la distrofia muscular de Duchenne, lesión del nervio ciático poplíteo (inerva musculatura extensora) secundaria a iatrogénia, fractura, etc. Y como etiología muy frecuente, la radiculopatía lumbar.
También puede producirse tras largos períodos de tiempo encamado, siendo susceptible de provocar una compresión de algunos de los nervios implicados o la pérdida de masa muscular posterior (gastrocnemio y/o sóleo) que favorezcan la aparición de un pie equino en una fase más tardía.

ACV con afectación de un lado del cuerpo, donde es más frecuente el pie equinovaro, donde se observa la afección al retro, medio y antepié, posiciónándolos en varo, cavo y pronación.

Espina bífida

Charcot-Marie-Tooth. Enfermedad neurológica genética hereditaria que empieza afectando los pies provocando dedos en garra y aumento de la bóveda plantar.

Parálisis cerebral infantil

Tipos de ortesis antiequinas y su tratamiento
Existen numerosos tipos de ortesis antiequino, atendiendo al material y a la localización anatómica.
Estas férulas han evolucionado gracias a la utilización de nuevos materiales. En la actualidad se investigan materiales más ligeros que permitan una adecuada biomecánica, de fácil manipulación, resistente a la flexión y resistente a las agresiones disminuyendo el rango de ruptura.
Los AFO más frecuentes son los elaborados con termoplástico, ya que presentan mejor contacto, adaptación, ligereza y estética que las metálicas, además de mayor facilidad para ser retiradas. Pero por el contrario, ofrecen una menor resistencia y durabilidad, así como una confección mas dificultosa y estar contraindicada en pacientes con piel insensible o edema fluctuante.
Los tipos de AFO difieren según el material en el que se fabrican:
- Metálicos (monotutor, bitutor con articulación libre, bitutor con Klenzack, muelle de Codivilla…).
- En termoplástico prefabricados (rancho los amigos sencillo o con modificaciones…).
- En termoplástico confeccionados a medida (espiral, hemiespiral, T de Denver, Tone-Inhibiting Ankle-Foot-Orthosis —TIAFO—, Dynamic AFO, Neurophysiologic ankle-foot-orthosis —NPAFO—, etc).
- Cuero.
- En fibra de carbono (AFO light, walk on, Matrix Max).
Las más reconocidas internacionalmente son:
- Ortesis antiequino seriadas
- Ortesis de Philips
- Ortesis antiequina BOXIA
- Ortesis antiequina TURBOMED
- Férula de JOUSTO-PERONEUS
- Ortesis antiequina en fibra de carbono “Dinamic walk”.
- Antiequino Matrix Max
- Ortesis antiequina WalkOn
- Ortesis AFO a medida en termoplástico
- Férulas Rancho de los amigos.
- Ortesis supramaleolar dinámica «Férula en U»
- Férulas en espiral o semiespiral de Plexidur.
- Ortesis antiequina conformadas a medida mixtas
- Férula antiequino nocturna o férula multiposicional pie-tobillo con antirotatorio.
- Ortesis AFO bitutor corto
- Ortesis con resorte de alambre
- Ortesis corta de marcha o ortesis antiequina Klenzack
- Monotutor
- Antiequino dinámico Libmann-Smith o muelle de Codivilla
- Bitutor antiequino o bitutor corto
- Rehabilitación Neuro y Corrección de Equino (Sistema FES de EMO)
Alteraciones neurológicas en la que más pueden ser empleadas:
- Secuelas de parálisis flácidas de los músculos de la pierna.
- Poliomielitis.
- Secuela de parálisis espásticas: Parálisis cerebral.
- Lesiones de nervio ciático poplíteo externo.
- Pacientes Hemipléjicos.
- Enfermedad de Charcot- Marie.
El empleo de materiales para su confección es muy diverso desde barras de aluminio y plástico hasta materiales sintéticos que faciliten confort y adecuación personal a cada paciente, facilitando una calidad optima de uso. El objetivo de su empleo, además de los beneficios biomecánicos es que no provoque ningún tipo de rechazo.